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Las EUMÉNIDES son fuerzas primitivas
anteriores a los dioses del Olimpo, por lo que no se someten a la autoridad de
Zeus, Rey de los Dioses. Son diosas ctónicas, pertenecientes a la tierra, pero
que viven el inframundo y solo regresan a ella para castigar los crímenes y a
sus autores, persiguiéndoles hasta volverles locos.
Las diosas de la
venganza eran tres hermanas:
ALECTO, la implacable, que castigaba los delitos
morales.
MEGÉREA, la celosa, que castigaba los delitos de infidelidad y
envidia.
TISÍFONE: la vengadora del asesinato, que lo hacía con los delitos
de sangre.
Representan la
rectitud de las cosas dentro del orden establecido, son las protectoras del
cosmos frente al caos, por eso los Dioses del Olimpo sienten hacia ellas
repulsión, una mezcla de respeto y temor reverencial. Los humanos simplemente
las temen y huyen de ellas.
Las EUMÉNIDES son justas, pero no tienen
piedad. Nada ni nadie puede impedir que lleven a cabo su vengativa tarea y sus
torturas solo cesan si el criminal encuentra a alguien que purifique sus
crímenes.
El
término que usaban en la antigua Grecia para denominar a las diosas de la
venganza era ERINIAS y su significado inicial era “persecución”, ya que su misión era perseguir
y castigar los delitos. Para evitar la ira que producía el decir su nombre los griegos comenzaron a utilizar un eufemismo: EUMÉNIDES, cuyo significado era “benévolas”.
En breve os contaremos mas cosas de la colección!!!
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